Apropiación Fotográfica

Anónimo, Buenos Aires 22 de Diciembre 1996

Después de hurgar un rato en la caja de fotografías familiares de mi novio, conseguí esta fotografía que captó mí atención. La foto es de una familia compartiendo un día en la pileta de la casa.

 En un principio me causo gracia la imagen y después de verla más detalladamente me generó un poco de desconcierto e intriga.

Observamos como elemento central a un hombre sumergido con los pies hacia el cielo. Luego tenemos a su alrededor a 3 niñas casi organizadas como en formación triangular y por último una caída de agua que alimenta la pileta.

Mi desconcierto viene ligado un poco al estatismo de la escena.

Las niñas están ahí quietas, todas mirando en direcciones opuestas, cada una con una expresión diferente y mientras que el sujeto del centro se establece como pilar del cuadro ninguna de ellas parece notarlo.

Percibo a todos estos elementos como puctum de la imagen, en cada uno hay algo que llama la atención y me mantiene observando la escena.

Al intentar adentrarme en la imagen llega a mí el sonido del agua cayendo, el sonido del viento contra las hojas de los árboles, una charla indistinta de las madres que deben estar acompañando a sus hijas desde afuera, pero todos los sonidos se manifiestan muy sutilmente, predominando mayormente el golpeteo del agua al caer.

Con la intervención de esta imagen busco resaltar esa pausa que parece ser accionada con el sumergimiento del hombre, como si estuviese cruzando su realidad de adulto con la de la niñez propiamente en la búsqueda de volver a esa sencillez, un portal acuático.